
#PalabrasAbiertas: «En mi fin está mi comienzo (In my end is my beginning)», por Juan Quelas
Texto escrito por Juan Quelas, co-fundador, coordinador general de Módulo Sanitario y voluntario
En el 10° aniversario de Módulo Sanitario
El título es el verso de un poema de T.S. Eliot, cumbre de la poesía inglesa del siglo XX. La formulación es rara. O se trata de una contradicción. O el autor está de remate. O la formulación es una paradoja. Esta última es la clave de acceso al texto. En mi fin (es decir, la finalidad, la meta, el para qué) está mi comienzo (los orígenes, el principio).
¿Qué muestra el poeta en su lenguaje metafórico paradojal? Que una persona o un acontecimiento no se agotan en la facticidad de su hoy. Que las coordenadas que me clavan en un instante contemporáneo no definen todo mi ser. Que el instante no agota mi identidad. Que lo que hoy puedo y hoy quiero no expresan la totalidad de mi ser ni de mi historia. El poeta sabe que sólo en la finalidad de la propia vida, en aquel horizonte hacia lo cual mi existencia se dirige, se puede vislumbrar lo que yo mismo era al comienzo. Que la historia real sólo se revela entera cuando he recorrido el camino entero. Que lo que me pasa hoy, bueno o malo, lindo o feo, no agota mi ser ni mis posibilidades. Que soy lo que soy, pero que soy más todavía lo que puedo llegar a ser. Un filósofo hablaría de antropología de destino. Un teólogo hablaría de vocación personal. Un psicólogo de realización existencial. Cada uno estaría expresando lo mismo desde su propio lenguaje, y todos estarían diciendo lo mismo.
Soy aquello que puedo llegar a ser. Y lo era desde el inicio de mi existencia. Soy el despliegue y la tensión que desde mi concepción hasta mi muerte han sellado mis trabajos y mis días. Fui en el primer instante aquel cuyo destino e historia quedarán sellados el día de mi muerte. En mi fin está mi comienzo.
Cuando Módulo Sanitario comenzó hace 10 años no sólo era la alocada idea de un grupo de amigos. Era la posibilidad de que 6 millones de argentinos tengan su propio baño. O que lo tengan 120 millones de latinoamericanos. Módulo Sanitario no era el baño de María. Era también todos los baños de todas las Marías del mundo que un día tendrán su propio baño.
Módulo Sanitario es mucho más que un baño. Es devolver la autoestima a miles de personas. Es tejer vínculos impensados. Es crear redes de cloacas. Es sacar agua potable de la roca. Es poner tanques en altura haciendo volar el agua. Es crear cooperativas de construcción de baños. Es educar en higiene. Es mejorar la salud. Es devolver la esperanza a cientos de miles de personas. Es crear un ámbito de trabajo donde la clave del progreso no sea la competencia. Es soñar juntos con un horizonte común. Módulo Sanitario es todo eso porque lo fue desde el inicio. Como un minúsculo grano de mostaza que ya es, desde su “graneidad”, un árbol gigantesco donde las aves vienen a posarse. En la finalidad de Módulo Sanitario está su comienzo.
Y en su comienzo está su finalidad. T.S. Eliot sabía que la fórmula es recíproca y por eso da vuelta el verso y lo incorpora a su poema: En mi comienzo está mi fin. In my end is my beginning. Quien olvida la memoria de su origen pierde la clave de su destino. Y quien pierde el norte de su existencia olvida su propio origen. Porque origen y destino son dos caras de la misma existencia, esa que se une en un lazo sagrado donde todo cobra sentido. Que el festejo de Módulo Sanitario nos recuerde el minúsculo origen de donde surgió. Y que nos abra la mirada hacia un fin de posibilidades insospechadas.
Feliz cumpleaños.