“Voy a poder invitar a mis amigas, antes no podía porque no tenía baño”: la historia de Tamara y su familia

En Argentina seis millones de personas no tienen acceso a un espacio propio donde mantener los hábitos de higiene. La ONG Modulo Sanitario lleva instalados casi 1500 baños en hogares vulnerables. “El esfuerzo por salir adelante es inmenso”, afirma una de las voluntarias

Aimara tiene 11 años. Lleva un patito en el pelo -de esos que son furor entre los chicos- y guantes gruesos, bien abrigados. Locuaz, se sienta a la derecha de su mamá: completa alguna frase que ella no quiere terminar o prefiere no recordar. Sonríe Aiamara. Sonríe con ganas: está feliz. “Ahora voy a poder invitar a mis amigas, que antes no podía invitar. A Aitana primero, y después a Sol y a Naomi”, cuenta, entusiasmada. ¿Por qué no podía invitarlas? “Porque yo no tenía baño. A ellas les agarran ganas de ir al baño y no podíamos. Y tienen vergüenza, capaz, de venir a una casa sin baño”.

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